La despoblación es sin lugar a dudas el primer problema territorial de este país. No es un problema que se pueda considerar reciente, sino que viene de muchos años atrás y por diversas causas. Es una situación que se ha ido gestando con el tiempo, pues hace dos siglos el 75% de la población vivía en los pueblos, y en el año 2000 la cifra había descendido hasta el 25%.
Esta realidad se proyecta en la provincia de Huesca, un territorio con más de 700 núcleos habitados y con una densidad demográfica que en varias comarcas es de menos de 4 habitantes por kilómetro cuadrado, si se exceptúa la capital comarcal.
La falta de vivienda en el medio rural, ya sea de venta o de alquiler, es uno de los principales problemas con que se encuentran los pueblos a la hora de fijar población. Para ayudar en lo posible a los consistorios, la Diputación Provincial de Huesca aprobó el pasado mes de marzo un Plan de Vivienda.
Aquéllos nuevos pobladores interesados, pueden solicitar información en el Ayuntamiento de Secastilla o a través del formulario de contacto.